Ganas de Escribir. Página web de Juan Torres López

No creo que el misionero Miguel Pajares haya muerto

Los medios de comunicación se han hecho eco profusamente del fallecimiento del sacerdote misionero Miguel Pajares, que fue repatriado desde Liberia gravemente enfermo por ébola, pero yo no creo que realmente haya muerto. No ha muerto porque quien muere libremente por elegir salvar la vida de los demás no muere nunca. No ha muerto porque como él hay todavía miles de misioneras y misioneros en todo el mundo que seguirán haciendo cada día y cada noche exactamente lo mismo que a él le hizo enfermar, sin quejarse y sin respiro, y por eso vive siempre en su ejemplo y compromiso. No ha muerto el Padre Pajares porque no muere su generosidad ni su amor a la gente que lo rodeaba. Está vivo porque su sacrificio vive en todas esas personas que dejaron sus casas y familias, el calor de hogares que nunca dejan de echar en falta, para ir a secarle pústulas, como él, a otros enfermos, o simplemente para llorar juntos sus calamidades, para rezar de la mano a cualquier dios generoso, para enseñarles, para mirar con los pobres el cielo  por las noches o para cuidar sufriendo mucho por dentro y sonriendo siempre por fuera de sus niñas y niños.

Es tremendo. No nos conmueve diariamente la enfermedad, el dolor y la muerte de miles de misioneras y misioneros como Pajares ni en realidad nos ha conmovido ahora la suya. Ha sido el miedo a que nos pase como a él, a que nos infecte a los ricos una enfermedad de pobres que no pueden quitársela de encima, ni quizá interese que se la quiten, lo que ha hecho que los medios de comunicación dediquen tanta tinta y tantas horas a un pobre misionero, como tantas y como tantos, creyendo que ha muerto. Sin saber que las misioneras y misioneros como él, hechos de puro amor, no mueren nunca.

31 comentarios

José María Ortiz Báñez 14 de agosto de 2014 at 12:50

Preciosas palabras para una conciencia enferma. Aprendamos de la lección.

Responder
Agustín Salvador 14 de agosto de 2014 at 13:45

No tengo datos ni conocimiento sobre la vida y comportamiento del misionero fallecido. Tampoco tengo claro si el altruismo de estas personas responde a una entrega personal neta o si hay detrás una causa suprema evangelizadora para ganar más adeptos a su iglesia y religión, la única verdadera. Me llamó la atención el que una persona tan generosa y religiosa, según se dice, tuviera tanto miedo a morir como un africano y pidiera el traslado y la salvación médica al Norte rico, con el consiguiente riesgo de transmitir la enfermedad. También circulan informes sobre la riqueza de su orden religiosa, su sicav, sus inversiones no precisamente en banca ética. En fin, yo no idealizaría tanto a las personas misioneras y sus misiones. Habrá de todo. Y seguramente, la mayoría serán contrarios a otro mensaje que no sea el de la resignación aquí y el cielo más allá (su iglesia-estado, seguro). Porque ¿ qué les pasaría si se quedaran sin pobres y sus calamidades? ¿Si los sobrantes de este mundo pelearan y consiguieran un sociedad sin miseria? El artículo, que respeto, me parece un exceso.

Responder
Beimler 14 de agosto de 2014 at 18:12

Está muy bien el artículo.Hacen falta muchas personas como el Padre Pajares que tan modestamente ha sabido morir por sus generosos ideales.No había podido leer todavía ningun artículo en medios de izquierda en que se le alabara,quizá piensan que serán menos de izquierda si elogian a un cura (cuando lo que toca,según algunos,es burlarse de ellos con algunas bromas fáciles).Le felicito profesor,por haber hecho lo que debía.

Responder
Pepe Ramos 14 de agosto de 2014 at 18:56

Estimado Agustín, menos conspirar y más intentar ayudar y hacer algo por los demás.

Responder
José María Ortiz Báñez 14 de agosto de 2014 at 20:05

Agustín, si hubiera tenido miedo a morir como un africano, lo lógico hubiera sido volver antes. Tampoco es lógico juzgar una trayectoria personal a través de la política del Vaticano, ni los ideales religiosos con la labor la labor humanitaria, ni ésta con las cuestiones trascendentales. Todo no es dar de comer a quien tiene hambre. No pequemos de ser excesivamente pragmáticos. Siempre quedan causas perdidas, dignas de reconocer al menos.

Responder
José María Ortiz Báñez 14 de agosto de 2014 at 20:10

La única religión verdadera… El austericidio en vez de Amar al prójimo como a uno mismo.

Responder
Esther 14 de agosto de 2014 at 22:15

Público.es
PORTADA OPINION PUBLICO TV FOTOGALERIA ARCHIVO SERVICIOS
Palabra de artivista
El ébola desenmascara al PP y a la Iglesia
08 ago 2014
Compartir: facebook twitter meneame Etiquetas: Cristofascistas, Ébola, Finanzas Querqus, Hospital Carlos III en Lucha, Miguel Pajares, PP, repatriación, Sanidad pública, SICAV
La violencia con la que la caverna mediática se ha lanzado a descalificar, o más bien calificar de “inhumano”, a todo aquél que haya cuestionado lo más mínimo la chapucera actuación del gobierno repatriando precipitadamente al cura infectado con ébola ha sido, cuando menos, reveladora. Dejando de lado el habitual acoso violentamente agresivo que aplican a todo lo que no se someta a su fraude (Vaticano S.A., inmobiliaria fraudulenta que vende parcelas en el más allá a precios de muy acá), han quedado dos puntos muy claros.
Por un lado tenemos el consabido trato de privilegio a la Iglesia, siempre a costa del ciudadano o erario público, que este gobierno cristofascista se empeña en imponer saltándose los más elementales principios democráticos y constitucionales. Se jactan de darle medallas a vírgenes, llenar de crucifijos y misas instituciones públicas, pedirle a vírgenes que arreglen la economía, prohibir marchas laica e imponer otras celebraciones católicas, declarar de interés público organizaciones cristofascistas vinculadas a la ilegalizada El Yunke como Hazte Oir, meter santos, curas y vírgenes en debates científicos, imponer capillas en universidades públicas, meter rosarios en nuestros ovarios y animar a criminalizar el aborto… La propaganda cristofascista del PP no ha tenido límites. Ni los del pudor.
Por supuesto, tanto los palmeros cristofascistas como los medios han negado una y otra vez la realidad de que si ha sido repatriado (y a tal costo y celeridad) ha sido sencillamente porque era un cura y el PP ha hecho santo y seña de su política de lanzar guiños, prebendas y privilegios a la Iglesia para satisfacer al ala más dura y a la propia Iglesia que le financia. Los cristofascistas no han escatimado en insultos, agresiones y manipulaciones para amordazar cualquier denuncia de esa prepotente imposición de la Iglesia en un estado aconfesional.
Los ignorangutanes cristofascistas, lacayos aborregados, se han lanzado a dar lecciones de moral a todo el mundo en las redes sociales ignorando su asqueroso historial de odio, tortura y opresión, su indiferencia ante muertes que ellos aplauden como la de los sin papeles en Ceuta o los numerosos sin papeles dejados morir a las puertas de centros sanitarios.
O los enfermos de Hepatitis C que se han visto obligados a presentar una denuncia conjunta al Gobierno del PP por omisión del deber de socorro al saber que el Gobierno ha dejado fuera de la Sanidad la cura efectiva en un 95% y es más barata que un trasplante de hígado. Se calcula que hay más de 900.000 personas con hepatitis C en España. Pero no son religiosos. O: Fallece el niño dependiente a quien el Gobierno de Cospedal exigía facturas para pagar sus cuidados. O, como bien ponía Joana Caballero en un comentario, “es inhumano considerar que si no hay dinero para mantener la planta de oncología infantil del Hospital de Toledo, haya casi 1.000.000 de euros para repatriar a una persona sola, por muy sacerdote que sea”.
Por otro lado tenemos el repugnante doble rasero que todo este embrollo ha evidenciado (una vez más). Así se da la absurda situación de que la pepera Comunidad de Madrid ha re-equipado a la carrera para una sola persona el mismo hospital que hace unos meses se empeñó en desmantelar para perjuicio de la población general. El Hospital Carlos III que lleva un año en lucha para no ser eliminado y que había visto como, a pesar de los reiterados avisos de sindicatos, especialistas y personal de que era una barbaridad desmantelar el único centro de referencia para infecciones, acabó desmontado y camino de ser cerrado. La Comunidad de Madrid y el Gobierno consideraban que el pueblo no tenía derecho a un solo centro y que no había dinero para mantenerlo. Un año después se infecta un cura y vuelven a montar a la carrera todo el centro.
A lo que se suma el insultante doble rasero sobre la asistencia sanitaria y la tarjeta, ya que a los españoles que lleven más de 3 meses fuera se les retira la tarjeta, así que ¿sobre qué privilegio antidemocrático a un señor que lleva 50 años fuera se le da asistencia pública que a los demás se nos está negando? Vamos, como bien lo puso el escritor Daniel Bernabé:
ebola-danielbernabe
Pero los médicos, como ya hicieran con la Marea Blanca, han dado una lección de honestidad al gobierno y los cristofascistas. El presidente de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), Daniel Bernabéu, ha denunciado que “es una decisión política, no sanitaria”. También ha alertado de que repatriar al sacerdote Miguel Pajares, infectado de ébola en Liberia, conlleva riesgos. Añadiendo que “El problema básico es traer a este paciente aquí, cambiarlo de continente cuando se le podría haber prestado los mismos cuidados allí que aquí”. Algo que incide en la pregunta que muchos nos hacemos: ¿por qué no mandar el material y ayuda a Liberia y no sólo beneficiar al cura español sino a las víctimas que hay allí? A esto hay que añadir la denuncia de Bernabéu de que en estos momentos se ha llevado a cabo un acondicionamiento “acelerado, urgente y a toda prisa de las instalaciones de aislamiento” en el Carlos III, que debería haber estado en funcionamiento y con un mantenimiento regulado si la Comunidad de Madrid no hubiera decidido que este centro fuera absorbido.
¿Por qué a otra española que pidió, así como su familia, reiteradamente ser repatriada al contraer neumonía (una enfermedad no contagiosa y tratable) se le negó y se le dejó morir en Argentina? Ah, es que no era monjita. Tuvimos que leer esta triste noticia: La madrileña que enfermó en Argentina y pidió ayuda para ser repatriada ha fallecido.
Pero no es que simplemente lo quisieran convertir en un geriátrico, es que la cosa era mucho más grave: como bien explica este artículo González y Lasquetty pretendían cerrar el Hospital al que trasladan al sacerdote infectado por el Ebola. De este nuevo saqueo de lo público para dárselo a los amiguetes y curas amigos hay que leer el Comunicado de Carlos III en Lucha: Ahora sí, ahora no, ahora el ébola lo propago yo que aclara la penosa actuación de la Comunidad y el Gobierno.
Sobre la santidad y entrega de este cura habría mucho que cuestionar. Primero que si se ha comprometido a ir a África a “ayudar” no salga corriendo en cuanto contraiga lo que la población explotada y sometida de Liberia sufre habitualmente. Segundo que eso de que lleva 50 años dedicado al prójimo me río: es un enfermero en un hospital de mierda (dicho por ellos mismos) jugando a ayudar cuando sacan buenos sueldos y un nivel de vida superior a la población local (más sobre esto debajo). A esto hay que añadir que la supuesta prestación que están dando no es gratuita. Es puro colonialismo, una invasión similar a la que hicieron en América para “evangelizar” (inscribir al mayor número de socios-lacayos) a cambio de cuyo número reciben cuotas de dinero y poder. El supuesto altruismo de la Iglesia es un saqueo de las economías y sociedades locales que han estado siempre en la raíz del peor colonialismo. Nadie necesitaba vuestra “civilización” (que llevó lo peor de la homofobia, racismo, clasismo y explotación). Dejad en paz a esas civilizaciones a las que habéis destruido y llenado de odio. Y todo para tener más dinero y poder. No nos engañáis, esa mierda de los misioneros altruistas no se la traga nadie: viven como dioses que imponen su voluntad y llenan su ego maltratando a pueblos a los que consideran inferiores. Y es que, como dice la quinta columna:
ebola-laquintacolumna
Y finalmente tenemos a la repugnante, hipócrita y despreciable Iglesia Católica. En concreto la Orden San Juan de Dios a la que pertenece el cura repatriado y algunas de las monjas que han dejado allí tiradas. Sobre esta peculiar orden hay que aclarar que posee algunos de los mayores hospitales de España, lo que hace preguntarse en primer lugar por qué no fue trasladado el cura a uno de esos centros privados que posee la orden. Pero, sobre todo, hay que saber algo de las finanzas y especulaciones financieras de la orden religiosa: como nos explica este artículo titulado Así invierte en Bolsa la principal SICAV de una orden religiosa: Mediaset, Prisa o las bodegas Barón de Ley:
Finanzas Querqus, SICAV, SA, propiedad de los Hospitalarios de San Juan de Dios que a cierre del ejercicio 2011 tenía un capital de 17.263.239 euros, casi 3.000 millones de las antiguas pesetas. Creada en el año 2000, ésta no es la única sociedad de esta orden, que también es propietaria de Gestión Hospitalaria 2000 S.L, domiciliada en la calle Herreros de Tejada nº 3, de Madrid, lateral del Hospital de San Rafael que regentan en la capital de España. Dedicada a la “gestión de compras y suministros de materiales, equipos y demás productos de carácter hospitalario y de servicios sociales y asistenciales”, y con 7 trabajadores en 2013, posee activos por 9,17 millones y facturó en 2011 la nada desdeñable cifra de 25,57 millones de euros.
Si estas cifras sorprenden no lo hará menos la nombrada SICAV. A 31 de diciembre de 2011 gestionaba más de 13 millones de euros en productos de Deuda y más de 520.000 euros en acciones de Bolsa, además de tener cuentas corrientes con 57.708 euros en nuestra moneda y otros 258.280,82 euros en divisas, la mayor parte de estas cuentas en el banco de negocios Santander Investment. Y es que la relación con el Grupo de Emilio Botín es excelente, ya que no sólo todos los valores se depositan en este Banco “selecto”, también gestiona la SICAV la empresa Santander Asset Management, y de los 13 millones en Deuda, 11,8 millones lo invierten en productos del Tesoro Público de España, pero también 1,16 millones en renta fija del Banco Santander.
Pero sin duda lo más llamativo está en su inversión en Bolsa. En pleno auge de microcréditos, responsabilidad corporativa y negocios éticos en general, Finanzas Quercus y sus gestores, según se desprende de la auditoría del año 2011 realizada por Deloitte, decidieron invertir en empresas como Mediaset (dueña de Telecinco, cadena de televisión famosa por formatos como Sálvame o Gran Hermano), el Grupo Prisa o las bodegas Barón de Ley, quizá esta última por haber levantado su bodega en lo que era un antiguo convento. También invierten en Banco Santander, por supuesto, en la juguetera Imaginarium y Vidrala. Esto en lo que respecta a valores que cotizan en España, en el extranjero lo hacen en dos compañías, dos gigantes del acero como son Kloeckner y Arcelor Mittal. ¿Es el fin de la iglesia invertir en empresas que representan lo más duro del capitalismo o que no son ejemplo para la sociedad? Lo malo es que Finanzas Querqus no es la única empresa propiedad de la Iglesia que actúa en este mismo sentido.
O este otro titulado La Orden Hospitalaria San Juan de Dios cuenta con una SICAV llamada “Finanzas Querqus”. En ese interesante artículo nos enteramos de que se denuncia los intentos de la orden de quedarse con un hospital en Manzanares:
La SICAV en concreto se llama Finanzas Quercus SICAV SA, que es una SICAV cuyos dueños son los Hermanos de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, que a su vez son los que según las últimas informaciones han firmado con el SESCAM un convenio para quedarse con la gestión del Hospital Nuestra Señora Virgen de Altagracia. El Presidente de la SICAV Finanzas Quercus es el Hermano Miguel Angel Varona Alonso, que es el Superior de la Provincia de Castilla dentro de la Orden, que a su vez preside dentro de misma la Comisión referida al Estilo de Vida.
La SICAV Finanzas Querqus tiene su sede en Boadilla del Monte (Madrid), en la Ciudad del Santander, y está gestionada por el propio Banco de Santander. Se formó en año 2.001 con un capital de 2.404.050 €uros. En el propio folleto de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se explica pormenorizadamente que “Finanzas Querqus pretende conseguir la máxima rentabilidad posible en función de las condiciones del mercado”. En el último ejercicio Finanzas Querqus contaba con un patrimonio de 14.990.000 €uros y consiguió una rentabilidad superior al 7%. Paradójicamente, en los últimos ejercicios, esta SICAV invirtió en renta variable parte de su capital en grupos como PRISA (El País, Cadena SER, etc. ) o Mediaset (La Sexta), no precisamente proclives a la Iglesia Católica.
Recordó Juan llegados a este punto que la misma Orden en su propia web se autocalifica como mendicante, movida por el espíritu misionero y por la caridad, valores que contrastan por completo con el hecho de que hay capital que la Orden va consiguiendo a través de sus actividades que sin duda va dirigido a incrementar el capital de su SICAV (Finanzas Quercus) cuyo objetivo no es el de construir nuevos hospitales ni ayudar a los que más lo necesitan, sino que es un dinero que se dirige hacia los mercados financieros para conseguir el máximo de rentabilidad económica.
Con todos estos datos sobre la mesa, recordó Juan las declaraciones realizadas por el Sr. Alcalde de Manzanares, Sr. Antonio López de la Manzanara hacia finales de octubre del pasado año, cuando el primer edil dijo que “la salud no es un negocio” a lo que a día de hoy, hay que contestarle que no es cierto, sino que en este caso “la salud sí es un negocio” porque sin duda, parte del dinero que el SESCAM le pague a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios irá a parar a una SICAV, para tributar al mínimo y que encima busca grandes rentabilidades refugiándose en la deuda pública española. También dijo el Sr. Alcalde que los beneficios de la Orden iban a construir nuevos hospitales, a las misiones, etc, lo cual no es exactamente cierto, ya que como se ha demostrado, el dinero va a parar a una SICAV para pagar menos impuestos. También dijo el Sr. Alcalde que los beneficios de la Orden no van a accionistas ni nada por el estilo. También es falso, porque los beneficios van a parar a una SICAV que está formada por accionistas.
Las conclusiones a las que llegaron los liberales son las siguientes: la OHSJD recibe dinero público, lo desplaza a una SICAV para pagar los menos impuestos posibles y finalmente invierte en renta pública soberana de España, para seguir recapitalizándose, todo lo cual es considerado por Liberales e Independientes por Manzanares como un tremendo fraude moral, quedando demostrado que al menos uno de los objetivos de esta Orden es conseguir dinero público aprovechándose de la buena voluntad de las personas para conseguir grandes beneficios económicos invirtiendo en bolsa y pagando los mínimos impuestos.
Esta es la realidad que hay detrás de la Orden Hospitalaria de los Hermanos de San Juan de Dios, organismo que quiere hacerse con la gestión del Hospital de Manzanares, siempre a costa de que los servicios mengüen y de que las condiciones laborales de los trabajadores empeoren: “estos señores no vienen aquí a pasar el rato, sino que vienen a ganar dinero para llevárselo a una sociedad que especula en los mercados financieros”.
Con semejante fortuna (25 millones en 2011 con Gestión Hospitalaria) e inversión en empresas meramente capitalistas (se explica que los medios de comunicación se cuiden muy mucho de criticar al cura o la orden), ¿por qué en lugar de invertir en asquerosos conglomerados capitalistas explotapobres no ha invertido ese dinero en África, más concretamente en crear un hospital en condiciones en el que tratar el ébola in situ y ayudar de verdad a los enfermos? ¿Es ese el modo en el que curas misioneros como el repatriado ayudan y asisten en los países que luego cacarean son su devoción? ¿Qué clase de hipocresía es ésta que despliega la Iglesia Católica y sus mil asociaciones subvencionadas que no paran de pedir dinero y luego lo invierten en televisiones y bancos?
Esto no hace más que corroborar la teoría de que a la Iglesia le interesa crear pobreza, hambre y enfermedad para hacerse propaganda de que la combaten cuando solo la preservan y diseminan por el mundo. Ese es el negocio de la Iglesia que luego encima usan como propaganda para que los infelices cristofascistas repitan el mantra de “la Iglesia atiende a los más necesitados por puro altruismo”. ¡JA! Que se lean el informe sobre la Orden San Juan de Dios y eso sólo es una millonésima parte del monstruoso negocio especulativo que tiene toda la Iglesia Católica. Ni hablemos del Vaticano S.A.
O de la Conferencia Episcopal española que no ha dedicado ni un céntimo a ese hospital en Monrovia o ningún otro, pero se permite el lujo de gastarse 25 millones de euros en rescatar la cadena 13TV(que seguirá generando pérdidas pero es prioritaria para generar odio y desinformación) como bien informa el titular La Conferencia Episcopal sale al rescate de 13TV tras registrar pérdidas de 25 millones. ¡25 millones de euros! ¿Sabe el lector cuantos enfermos se podrían asistir o curar con ese dinero? ¿La Iglesia ayuda a los pobres con su dinero, subvenciones, IBI no pagado, donaciones y robos de edificios por inmatriculaciones? Y un mojón. La Iglesia es una empresa que vive del engaño y la propaganda y ahí inverte la mayoría de su fortuna.
Que cumplan lo que predican y se queden en las misiones esperando a que su creador les llame a su lado. Cosa que, desde luego, no ha hecho el cura Miguel Pajares que habla mucho de Dios y del Demonio (vergonzosas, ignorantes y ridículas sus declaraciones al ser evacuado de ‘nos han metido el diablo dentro’) pero corre a que le trate la ciencia en lugar de rezar y quedarse en Liberia donde está Dios. Porque Dios está en todas partes según ellos, pero si es con los médicos y la ciencia atea en hospitales públicos que ellos desmontan y atacan (leed en los artículos cómo su orden se queda con hospitales públicos para desmontarlos), mejor. No debe creer mucho en Dios, el rezo y su abnegada religión. Lo mismo que esa fascista de Teresa de Calcuta, que fue tan canalla de negar analgésicos a los moribundos, reutilizar jeringuillas y promover el sufrimiento porque “cuanto más sufriesen más cerca estaban de Jesús”. Pero ella, escoria, se benefició siempre de las mejores y más caras clínicas a las que le llevaban aviones privados. Hipócritas, escoria y cristofascistas.
No quisiera acabar sin recordar que en este momento, la Iglesia Católica a la que se atribuye tanta santidad como a este cura que suscribe toda la discriminación cristofascista, ha declarado a través del Arzobispo católico Lewis J. Zeigler, junto a otros 100 obispos y curas de varias iglesias cristianas, que el ébola es un castigo divino por “actos inmorales como la homosexualidad” (aquí la fuente original en inglés con fotos de católicos a los que no menciona el artículo en español). ¿Y éstos son los que dicen que están allí para ayudar a todos sin entrometerse en la política ni generar odio? Venga ya, pandilla de asesinos. Luego desentenderos cuando se crean leyes para matar a homosexuales o meternos en la cárcel. Sois siempre vosotros los que con esa cutre y deficitaria asistencia metéis el odio y la tortura.

Responder
Antonio Gonzalez 15 de agosto de 2014 at 01:50

Se trata de un caso que en lo personal se dispone de muy poca información
para evaluar la calidad humana de esta persona, lo que si desluce el caso
es que se le intentaba conceder lo que se le niega a miles de espanoles a
los que se le niega también salir en las noticias y se le reprime duramente
cuando intenta reclamar sus derechos ciudadanos o vasallos.
Los tiempos no están para las tonterías de siempre, hoy en día con el nivel
de información existente mucha gente se pregunta de donde salió esta muy
oportuna epidemia de ebola y por que no se hizo nada para detenerla en su
etapa inicial una muestra mas de que la civilización dedica mas tiempo y
recurso a la muerte que en apoyar la vida.
Y para creer esto no hace falta ninguna teoría de conspiración.
Tampoco creo se deba convertir en un martir de la fe y nos sorprenda algun
día la noticia de una precipitada beatificación o canonización como se estila
hoy en dia.

Responder
Agustín Salvador 15 de agosto de 2014 at 08:38

No veo ninguna conspiración por mi parte al comentar el artículo de Juan Torres. Ahora bien, si hay que conspirar para conseguir mejorar las condiciones de vida con libertad y justicia social (derechos, no caridad), conspiraré. Y como Pepe no sabe nada de mi vida personal, patina con lo de «mas intentar ayudar y hacer algo por los demás.» A Jose María, solo decirle que dudo y pongo en duda, y que ya sé que no todo en la vida son los medios materiales dignos, pero me parece que sin estos, todo lo demás son juegos de artificio. Un saludo a ambos.

Responder
Beimler 15 de agosto de 2014 at 12:21

Esther,cariño,menudo rollo.No pretenderás que nos leamos todo esto,verdad ?.Me parece que confundes la Iglesia Católica con los Conferencia Episcopal Española,una guarida de fachas,lo reconozco.La Conferencia,etc,no es más que la rama eclesiástica del PP.Pero la Iglesia Católica es mucho más.Son dos mil años de historia de luces y sombras e infinitos tesoros de espiritualidad,que un servidor,no practicante,te invito a pesar de ello a leer algún día o,cuando menos,a respetar.

Responder
Jacinto Martin-Prat Valls 15 de agosto de 2014 at 14:38

!Chapeau¡ Magníficas palabras para un hombre,como tantos que por fortuna hay,que dan la vida por los demás.Dan la vida a cambio de vivirla con todas las consecuencias.

Responder
A. Montes 15 de agosto de 2014 at 17:07

Hasta tres veces he tenido que leer el artículo. Ni remotamente se me ocurrió pensar, hasta ahora, que el autor fuera tan… proclive a los postulados de la iglesia católica. Aún cuando a título personal, todo el mundo tiene derecho a sostener el dogma de su elección con su propia fe, o con sus propios recursos, no es de recibo que tal carga deba recaer en quienes no lo compartan.
Teniendo en cuenta el lamentable estado en que están dejando la sanidad pública la casta que nos gobierna (y de la cual la iglesia católica es algo así como el reverso tenebroso), me parece absolutamente deplorable el despilfarro de recursos públicos que ha supuesto el traslado de esa persona.
Aplaudo la extensa aportación de Esther.

Responder
Maria Teresa 16 de agosto de 2014 at 01:11

Os he leido a todos con atención.
Me quedo con el abandono en el que están los pobres . La gente sencilla, de la calle sufre de miseria, enfermedad, desesperación. ¿Qué hacemos los que estamos aparentemente a salvo?
El ébola, la hepatitis C, la falta de agua, el hambre, el abandono, la pobreza, la desprotección, el desempleo, la totura, la guerra, la esclavitud, la aniquilación de los servicios públicos, los desahucios, la violencia impune que supone todo ello.
Sin duda que todo ello no es posible por qué si. Son consecuencia de la codicia de las personas. Los administradores de los estados, de las religiones no son ajenos a la codicia de los poderosos de este mundo, los que tienen el dinero.
Este religioso pensaba que hacia «el bien» con su vida. Ahora, puede que no fuera lo que estas gentes necesitaban en realidad. Suele pasar que vamos de sanadores y no escuchamos a aquellos que pretendemos ayudar. Nos hacemos los protagonistas de todo «lo bueno».
Lo cierto es que las mujeres y hombres que murieron por el mismo virus u otra causa debida a la pobreza o miseria que padecian, vivieron haciendo lo que podian por sobrevivir ellos y sus familias. Muchas de estas personas habrán cuidado de aquellos que se infectaron con éste u otro virus. A estos nunca los conoceremos. Cuando se supone que son a ellos a los que el religioso queria hacer «el bien». La desconfianza sobre ese «bien» aparece cuando el religioso se hace conocido y las mujeres y hombres aparecen sin rostro, sin historia.
Me parece interesante el artículo de El País sobre la vida de Foday. Superviviente de esta epidemía. Ahora llega a su casa, con su familia, afectada también por el ébola. Comienza de nuevo a luchar por sobrevivir con su familia. Habla, también, de los 300 trabajadores comunitarios locales que trabajan con Médicos sin Fronteras.
Es necesario y prioritario hacer las cosas de otra manera. Lo prioritario es enviar toda la ayuda económica, profesional,… posible a los paises afectados. Y no cerrar el Hospital Carlos III, que siga prestando la atención sanitaria pública que tanto necesita la población.
Y seguir dándo a conocer lo que en absoluto está bien. No se puede servir al ser humano y al dinero a la vez. Eso es lo que dijo Jesús.

Responder
Guy 16 de agosto de 2014 at 04:18

Gracias por el artículo nada exagerado. Nadie es perfecto. He vivido en África unos años hasta que me operaron de urgencia y me hicieron volver a costa de la salud. Cuando no hay casi nada cualquier enfermo es una carga muy grande. En el caso del Padre he visto una interpelación fuerte para esta sociedad nuestra, tan rica aún en medio de la crisis que, tiene miedo a contagiarse. Gracias a su muerte en España quizás pueda llegar más ayuda, la que llevaban tiempo pidiendo. Tiene que pasar algo gordo para que reaccionemos. Así pasó con el genocidio de Ruanda. Casi nadie sabía que existía ese pequeño país hasta que las matanzas despertaron al mundo cuando ya era tarde. Ahora el pueblo sigue sufriendo. ESPEREMOS QUE ENTRE TODOS LOS PAÍSES MÁS DESARROLLADOS PODAMOS HACER LLEGAR LA AYUDA QUE NECESITAN… URGENTE

Responder
Jordi Feliu 16 de agosto de 2014 at 12:05

Este caso del misionero Miguel Pajares está abriendo nuevamente el debate sobre los privilegios de la Iglesia que tanto defiende el PP y veladamente también el PSOE.
El hecho es que la OMS denuncia la pasividad de los gobiernos en atajar este problema, que lo único que han hecho es repatriar algunos enfermos y dejar a su suerte a los pobres tercermundistas.
Así que otra vez quedan en evidencia los gobernantes del primer mundo a los que, tarde o temprano, todos estos despropósitos y medidas de propaganda electoral pasarán factura.

Responder
José María Ortiz Báñez 16 de agosto de 2014 at 12:37

Agustín, estamos de acuerdo en lo «último»: «todo lo demás son fuego de artificio», ya sean credos, ideologías o teoría económica. Y mejor así, porque «la vida es sueño y los sueños (coma) sueños son», antes que experimentar como estalla el fuego bélico por no quererse ver los hechos. A eso me refería, a la dignidad de hechos que merecen ser reconocidos. No entiendo por qué se cuestiona la labor humanitaria de alguien. Me pregunto si se hubiera armado todo este revuelo si, en vez de cura, Miguel Pajares hubiera sido un miembro más de la Cruz Roja, un reportero o uno de tantos profesionales expuestos valientemente al peligro, por el bien de todos. ¿Se les juzgaría como al padre Pajares mientras los Barrabás de turno siguen ejerciendo poder desde las instituciones supuestamente democráticas?
Creo que hay cosas que nunca cambian: el valor de los hechos; es decir, el dogma que, al menos, nos dota de un sentido histórico universal…
«Por supuesto, yo siempre he creído que la palabra crea realidad, lo que pasa que no es la realidad literal de lo que tú quieres hacer con la palabra.» Carmen Iglesias. ABC, 15/05/2013.
Saludos.

Responder
Agustín Salvador 17 de agosto de 2014 at 21:18

Estimado Jose María, no sé si algún día conoceré más datos sobre la biografía personal del misionero y sobre lo que ha habido detrás de su traslado a España, con tanta rapidez y gran despliegue de recursos. Quedamos pendientes también de ver qué se haría con un miebro de la Cruz Roja, un reportero o uno de tantos profesionales valientes, como Vd. dice. Sobre todo si no pertenece a una organización potente e influyente en España (como lo es la Iglesia Católica). Habría que valorar también si no sería más adecuado trasladar equipos médicos a Africa y atender allí a las personas enfermas. Yo no cuestiono la labor humanitaria de nadie, pero me parecen exageradas ciertas loas hacia quienes lo hacen porque pertenecen a una orden religiosa de una iglesia, con la misión de evangelizar y ganar adeptos para su causa, llevar la palabra del dios de turno, etc. Que hacerlo netamente por una solidaridad personal que no busca más que ayudar, sin tratar de convencer a nadie de sus ideas personales. Hay gente de ésta. Saludos.

Responder
Vicente 18 de agosto de 2014 at 06:52

Usaron, una vez mas, la sanidad pública: el orgullo de España. No la privada, no fuera a contagiarla del ébola, aunque quizá fuera la solución de nuestros problemas con este gobierno que sufrimos. Pensando en el ébola, me acordé que muchos palestinos deberían contagiarse voluntariamente y restregarse como perrillos por Israel, a ver si lo que no terminó Hítler, se ultima con esa infección. En cuanto a la Iglesia, Ellacuría y los demás están aún esperando reconocimiento de su sacrificio, muertos por los fusiles oficiales de El Salvador; incluso en una conmemoración celebrada años después, dejaron de asistir precisamente los componentes de la Conferencia Episcopal española. Dejémonos de hipocresías: la única obra benemérita que hoy tendria un valor real sería tomar un K-47, y de eso estamos, por lo visto, muy lejos, lejísimos…

Responder
José María Ortiz Báñez 18 de agosto de 2014 at 14:03

Agustín, las creencias sobre lo bueno y lo malo siempre van a estar. Por principio, la moral y la ética contiene esencialmente lo que es ser humano. En el día a día, estamos envueltos de patrones de comportamiento que nos referencian, llámese Jesucristo, Mahoma, Cristiano Ronaldo, Messi,… De una u otra forma, actuamos creyendo en valores que consideramos buenos y malos. Actuar bajo creencias no es necesariamente la sinrazón del pensamiento monolítico, sin huecos ni fragmentos, como diría Hegel. Al respecto, se presentan dos posicionamientos: el tiempo de pensar sin más «cómo sería si…» y el tiempo de «ponerse manos a la obra», cuando las razones sobran. Y en este sentido, el de actuar por el cambio, es básico creer. No despojemos a las ciencias sociales de su razón humanista fundamental. Los posicionamientos tecnicistas, en política, serán nuestro final, al igual que cualquier religión impuesta, desde el poder político. Ni la política debe meterse en la casa de Dios, ni el lugar de la religión es la plaza del pueblo. El padre Pajares fue alguien que actuó como hombre de bien, según relata esta biografía publicada en El País:
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/08/15/actualidad/1408128449_776215.html
P.D: Y que conste que no soy «pro-religión». Soy partidario de la formación ética de las personas y la componente moral de cada cual. En eso trato de poner la atención. Un abrazo a todos!

Responder
Agustín Salvador 19 de agosto de 2014 at 08:43

José María, siento decírselo así, pero me da Vd. unas «lecciones magistrales» en las que, por mi cortedad intelectual, no encuentro réplicas concretas a mis opiniones. Por mi parte, dejo el debate, pues me parece apreciar que ya no vamos a avanzar mucho en la discusión, si es que la hay y estamos hablando de lo mismo. Solo terminar diciéndole que comparar el referente Jesucristo-Mahoma con el Cristiano-Messi mezcla churras con merinas y confunde. Vea Vd. las repercusiones históricas y sociales. En fin, un placer. Saludos.

Responder
José María Ortiz Báñez 19 de agosto de 2014 at 22:31

Agustín, terminando con mis exposiciones, por si no han quedado claras, le replicaba en cuanto a su valoración sobre la religión. En un sentido más amplio, sólo son una forma más de Creencias, para bien y para mal. Tan fanático puede ser un religioso como el hincha de un club de futbol, o un teórico científico. Distinguirse de esas posiciones es actuar sensiblemente con la realidad, de acuerdo a unos valores morales y éticos, en los que se crea. En política, lo principal son las creencias para actuar. Mi réplica no iba en contraposición a su comentario, más bien lo incorporaba como una valoración adiccional, para que la perspectiva fuera más inclusiva. No sé si es impresión mía, pero veo cierto tufo anticlerical, y sin razón, en toda esta historia con el padre Pajares.

Responder
jesus de la fuente 20 de agosto de 2014 at 09:02

De acuerdo con los postulados expuestos por Agustín Salvador. Muchas gracias.

Responder
Agustín Salvador 21 de agosto de 2014 at 08:59

José María, ¿Cómo puede hacer esas comparaciones y ponerlas al miso nivel? El fanatismo religioso es un peligro para la humanidad. Sólo hay que leer el periódico todos los días. Y la religión no es sólo una forma más de creencia. Es, entre otras cosas, una creencia definitiva e inalterable basada en inamovibles e indiscutibles cuestiones de fe, que pretende implantar universalmente una doctrina perfeccionista-totalitaria con respecto al pensamiento y comportamiento humano. Lleva en sí la semilla del fanatismo, aunque no siempre ni en cualquier circunstancia se desarrolle éste. Nada que ver con el hincha de futbol y mucho menos con el teórico científico. Y sí, desconfío del tufo clerical. Desconfianza que a mi me huele muy bien.
Y termino recordando que mi opinión sobre el artículo de J.Torres era que, dentro de mis dudas y por otros indicios que tengo, me parecía excesivo en sus loas al misionero y a las personas religiosas que van a las misiones.

Responder
José María Ortiz Báñez 21 de agosto de 2014 at 20:42

Agustín, no se lo tome a mal, pero tenemos distintas perspectivas acerca de la religión, según usted, o las religiones, según yo.
La definición que usted aporta se puede aplicar a numerosos casos a lo largo de la historia, en campos pertenecientes a ciencias como la medicina o la psicología, por no querer aludir a casos de la Economía, que no es una ciencia en el sentido riguroso y siempre queda sujeta a creencias.
Tan fanático es quien quemaba herejes en la Edad Media, como quien es capaz de matar a un hincha del equipo contrario, o incluso, los médicos psicólogos que pretender «curar» la homosexualidad, por ejemplo. Para mi, las religiones pertenecen al universo de la Metafísica, verdadero invento literario de la humanidad, como El Quijote, o el Vogue, o tantas otras celebridades humanas, sobre las que cada cual adopta posiciones en la vida, se hace una cosmovisión del mundo, se plantea aspectos trascendentales a uno mismo, se consuela en las preguntas sin respuesta, como son las experiencias de amar y sufrir. Así entiendo yo la religión, sin amor al poder, sino como Jimmy Hendrix, con el poder del amor. «Ama a tu prójimo como a ti mismo» decía otro personaje histórico. Ahora que venga un científico, con un par de esos, y me demuestre que no llevo razón en lo dicho. Cada uno cree en lo que quiere y como le da la gana.

Responder
Agustín Salvador 22 de agosto de 2014 at 17:39

Jose María, no me tomo nada a mal y me encanta debatir. Sobre todo en estos días que tengo más tiempo. Admito que las religiones también tienen esas otras vertientes que Vd. apunta, pero siempre mal acompañadas y subordinadas a dogmas de fe y a metafísicas que rayan en el esoterismo y la superstición. Algo que en muchas ocasiones tiene y justifica trágicas repercusiones para muchísimas personas. Y dale: comparar a una fría y calculadora estructura de poder eclesiástico-religiosa como la Inquisición con el famosos hincha descerebrado que en un calentón se lleva a otro por delante… Pues «venga Dios y lo vea». En fin, lo dejo para que lo enjuicien otras personas de este blog, si les apetece. Y sobre los médicos psicólogos que cita, investigue, por si acaso, qué pensamiento religioso (o derivado de la cultura religiosa) tienen. Yo, en su lugar, tendría más respeto por los científicos (los auténticos, no los charlatanes). Son gente muy seria, estudiosa y prudente en sus conclusiones, admitiendo la provisionalidad de éstas. Nada que ver con tantos y bien situados «poseedores de la verdad» del campo religioso. Lo de «un par de esos», sin comentarios. Bien, opinamos diferente. Es nuestra libertad, en una libertad que respeta la vida y los medios de vida dignos de cada uno. Un saludo.

Responder
José María Ortiz Báñez 23 de agosto de 2014 at 20:36

Agustín, muy bien en su apreciación sobre los fallos cientificos cometidos por los humanos. Ha ido usted justo donde creía: a colocar el aspecto religioso por encima del rigor científico. A eso he estado refiriéndome en todas mis intervenciones, al aspecto irreductiblemente creíble de los actos humanos que se cometen… Y no olvide usted que los hinchas asesinos matan «por los colores» de su equipo. No lo hacen por la sinrazón de un brote de locura. También se ven hinchas ultra, esos son ejemplares de otro cantar… Respecto a la expresión «un par de esos»… jejeje, espero que no se haya sentido ofendido. No iba con esa intención. Simplemente jugaba con un mensaje subliminal que, de hecho, no entendería nadie fuera de «nuestra» cultura, por ser un dicho muy escasamente científico. Tómeselo en tono hirónico. Es más, usted ha completado imaginariamente el significado. Tómeselo en tono hirónico, sin maldad.
En resumen, no soy «pro-religión» en el sentido que usted apunta. No estoy contra la defensa de la Razón sobre los Fanatismos. Realmente, yo apoyo su posición, intentando de hacer valer la moral y la ética, porque sus creencias son las que impulsan a actuar hacia el progreso «humano». Si no, ¿qué es lo que alienta a un investigador mientras no ha encontrado la solución al problema?. Yo lo llamo fe en si mismo. Indiscutiblemente, en otras ciencias, como la Física, no habría lugar para este tipo de discusiones, tan propias de la sociedad.
Me ha gustado esta «contienda» dialéctica.
Un cordial saludo, Agustín.

Responder
José María Ortiz Báñez 24 de agosto de 2014 at 11:07

Hirónico, sin h. Irónico, así se escribe. Se me fue la cabeza tecleando :-)

Responder
Agustín Salvador 29 de agosto de 2014 at 13:09

José María, otro día más y mejor. Un saludo.

Responder
Agustín Salvador 8 de octubre de 2014 at 12:57 Responder
Ana 10 de octubre de 2014 at 05:54

Ya lo decia Galdos: «las legiones de misioneros con que nuestra precavida civilización trata de amansar las bárbaras hordas africanas y asiáticas, antes de desenvainar la espada contra ellas». (En: Torquemada. Benito Perez Galdos) Ese es el ‘bien’ que hacen los misioneros. Lo que hay que leer!

Responder

Dejar un comentario