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3 comentarios
Este artículo avala con datos muy concretos el carácter inmodélico de la transición, la existencia de una casta política (en la que están implicadas por acción o por omisión todos los partidos con representación) y la necesidad de abrir un proceso constituyente de la mano de nuevas fuerzas políticas respaldadas por movimientos sociales alternativos, autofinanciadas y dispuestas a construir un nuevo imaginario colectivo desde las redes sociales y otros medios de comunicación alternativos.
La misma burguesía que construía los pantanos de Franco es la que supo tejer los paños reales de la transición, mover con habilidad sus peones, seducir y corromper a los que pudieran representar una alternativa de poder, otorgar plenas garantías de inmunidad a los principales alfiles y torres y sacrificar a los que pudieran acabar representando un obstáculo (que es la situación actual de Pujol por apoyar el independentismo).
Podríamos especular que quienes más han contribuido al éxito de este modelo de corrupción y privilegios de una casta son al mismo tiempo claros candidatos a haberse beneficiado de dicha corrupción por la situación de especial inmunidad que tienen al haberse convertido en piezas fundamentales. ¿Qué tendrían que hacer o declarar Esperanza Aguirre, Felipe González o José Bono para que se investigara su patrimonio particular de modo parecido a como se está haciendo con el de Jordi Pujol? El hecho de que estos tres personajes estén entre los que con más acritud han reaccionado ante Podemos demuestra al mismo tiempo su alta responsabilidad en el mantenimiento del modelo y lo mucho que podrían perder personalmente si en España se produjera una verdadera alternativa de poder dispuesta a revisar el pasado y a hacer justicia.
Otra importante reflexión sobre el artículo es que la burguesía nacional y transnacional que pactó el modelo vigente en España no sólo está dispuesta a sacrificar los peones que se interponen en su camino sino incluso a las fuerzas políticas que, por el desgaste natural que implica pretender gestionar los intereses de los privilegiados con modelos de sufragio universal y pluralismo de partidos, pierden el apoyo popular mayoritario, sacando de la chistera otras opciones, como sería el caso de Unión Progreso y Democracia y Ciutadans. Siguiendo la línea argumental del autor, a estos nuevos engendros de laboratorio se les ha asignado la labor de cuestionar la labor de los peones políticos que, por le lógico desgaste de sus corruptelas y traiciones al servicio de los privilegiados, han caído en desgracia ante el electorado, jamás los intereses de estos ni los modelos políticos que los amparan.
No es de la viabilidad de las propuestas políticas de Podemos de lo que hay que dudar sino de que la casta que simplemente reformó el franquismo esté dispuesta a aceptar su puesta en práctica. El laboratorio de política ficción que hoy es América Latina, con ejemplos como el de Venezuela, Bolivia y Ecuador, ponen de manifiesto que es la negativa de la burguesía a que se cuestionen sus privilegios en beneficios de las mayorías, llegando a cuestionar la legitimidad de quienes gobiernan con las mismas reglas del juego y animando a la desestabilización y el golpismo, el único obstáculo con el que podría encontrarse una formación como Podemos a la hora de cumplir su programa electoral, que, sin duda, es el que mejor podría sintonizar con la letra y el espíritu de la Constitución de 1978.
El recuento no es mas que una historia de corrupción
«democratica» y que por serlo tiene derecho al sello de
impunidad, el clasico una mano lava la otra y las dos
lavan la cara.
El colmo es que la sociedad deba aceptar todo esto
como lo mas normal del mundo incapaz de poner las
cosas en su lugar.
Buenas.
Con retraso. Agosto es Agosto.
Se puede decir más alto, pero no más claro. El que quiera oír que oiga. Lo demás son -con perdón- pajas mentales. Discursos para idiotas y poco más.
¿Saben qué es lo bueno? Que ya está dicho. Ahora, solo queda mantener sobre ello el foco, y no apartarlo para nada. Como cuando la «poli» en las películas pone el foco de helicóptero en el coche de «los malos». Así a partir de ahora, la ciudadanía debe evitar que los partidos de la casta y aledaños puedan sacarse el foco de encima.