Ganas de Escribir. Página web de Juan Torres López

Sobre el gobierno PSOE-IU en Andalucía: ¿Valdrá la pena?

Publicado en La Marea, nº 3, marzo de 2013

Desde que se conocieron los resultados de las últimas elecciones andaluzas el debate que se abrió en el seno de las corrientes progresistas fue si Izquierda Unida debía entrar o no a gobernar. No oculto que yo defendí desde el primer momento que debería ser así por dos razones fundamentales. Una, que me parecía que esa era la forma de evitar que gobernase el PP abriendo al mismo tiempo una nueva etapa de políticas más avanzadas. Otra, porque creo que la izquierda pierde toda su credibilidad ante la sociedad si, cuando puede, renuncia a transformar el día a día del marco real en el que los seres humanos desarrollamos cotidianamente nuestra vida. No creo que valga eso de presentarse ante los demás como quien tiene la llave de un futuro mejor y luego desentenderse para dejar a otros la engorrosa gestión de un presente del que, al fin y al cabo, depende el bienestar o el sufrimiento de las personas.

Todavía hay quien me lo reprocha. Parece que los estragos que vienen provocando las política del gobierno de Rajoy, su ineficacia económica, el servilismo hacia los grupos oligárquicos, y su identificación con la extrema derecha más cerril que busca volver a las andadas del franquismo, no son suficientes para que algunas personas entiendan que la vida real no funciona en blanco y negro.

Hasta el momento, el gobierno del PSOE e IU se ha venido dedicando a lo que prioritariamente debía hacer: organizar la resistencia. No había que ser un lince para saber que debería hacer recortes porque no está en su mano incrementar a corto plazo los recursos para hacer las políticas que serían necesarias. Pero creo que ha sorteado con suficiente habilidad y sensibilidad social las principales dificultades que en este sentido se han ido planteado a lo largo del tiempo, y principalmente en la elaboración de los Presupuestos. Basta ver lo que están haciendo las comunidades gobernadas por el PP, o el gobierno central, y comparar.

Yo creo que la crítica al gobierno andaluz no puede basarse en que tiene que recortar para poder gestionar con menos recursos, como si eso fuese el resultado de una decisión propia. Lo que hay que poner sobre la mesa es si considera eso inevitable, cómo afronta la situación, cómo se plantea obtener más ingresos en el futuro inmediato, o con qué efecto distribuye las cargas no solo de ese recorte sino del conjunto de su acción política.

A mi juicio, la presencia de Izquierda Unida en el gobierno, y el cambio de sintonía que eso ha supuesto para un PSOE que estaba fatalmente acostumbrado a gobernar por inercia, está sirviendo para que en Andalucía se afronten los problemas con otra filosofía política y eso, de entrada, me parece muy importante. Como he dicho antes, nada mejor que ir a los hechos y comparar.

Lo que ocurre es que dentro de poco esa diferenciación entre la actitud del gobierno PSOE-IU y la del PP tendrá que ir adquiriendo sustancia y no podrá quedarse solo en las formas o en las intenciones.

Andalucía no está en condiciones de salir adelante si se deja llevar solo de la inercia, si cambian los pilotos pero se sigue avanzando por la misma vía, porque la dirección por donde ésta transcurre, y no solo la personalidad de quien conduce, es lo que hipoteca nuestro futuro.

El gran error de años anteriores ha sido creer que la solución de los viejos problemas de Andalucía (desvertebración, dependencia, desigualdad, desindustrialización…) se resolvían logrando una mayor integración en el entorno, sin tener en cuenta que éste, un capitalismo que empobrece a las periferias y la globalización neoliberal, son precisamente el problema y no la solución. Esta es la dinámica que hay romper y para ello hay que empezar ya a diseñar nuevas estrategias y a empoderar y movilizar mucho más a la gente con pedagogía, transparencia y mucha más participación ciudadana. Y ahí es donde yo veo, de momento, los mayores déficits del gobierno andaluz.

20 comentarios

Sergio 12 de marzo de 2013 at 12:04

El contacto con la dura vida del día a día, me devuelve una realidad que no está en el discurso de los académicos. Las reglas del juego las han cambiado y nos hacen jugar con las mismas fichas. Esto es:
-Nuestras viviendas valen un 40% menos de la hipoteca que hemos pedido por ellas. No obstante tenemos que pagar el mismo importe del contrato.
-Hemos perdido el trabajo. Pero tenemos que seguir viviendo y pagando la hipoteca.
-Aún así generamos un gasto excesivo que debe financiarse con dinero del exterior, porque hemos renunciado a nuestra autonomía monetaria. Por lo que hay que hacer recortes en servicios, generar más desempleo, debilitar las prestaciones,etc.
-Y por supuesto respetando un orden constitucional y unas leyes elaboradas por oligarcas y votadas por casi nadie.
-AH!! Y nuestra participación en este juego es votar a partidos, cada 4 años que presentan programas como IU y que luego no siguen, porque hay que respetar el juego.
-Rectifico; también puedes pegarte un tiro, irte de España (que te pagan hasta el viaje,…para eso si hay dinero), o vagar poe las calles pidiendo limosna. Ahora eso sí, la vivienda la pagas.
Hace 2 «siglos»en una mesa debate en la casa de la provincia con Joan Melé, le pregunté -¿por que España y otros estados no podían generar su dinero según lo necesitan?-. Su dubitativa respuesta referenciando el sistema árabe y problemas de inflación no me aclaró mucho.
Vuelvo a preguntarle ¿Por qué IU no rompe las reglas del juego y pide a la JA que acuñe una moneda de curso legal basada en la fuerza laboral de más de 1.000.000 de desemplead@s? ¿Por qué no puede compatibilizarse la coexistencia de dos monedas; la de la vida real en Andalucía y la especulativa de déficit? Sin menoscabo de la reforma sociodemocrátajustosolidarihiperpacífica que pretendemos.
Gracias.

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Conrado 12 de marzo de 2013 at 13:07

Lo veo difícil, aunque sería lo deseable para el gobierno de Andalucia. Las políticas de los dos partidos van a tener fuertes encontronazos. Vivimos en un estado de partidos y poco parlamentario.

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Carlos 12 de marzo de 2013 at 13:29

Muy de acuerdo con este artículo.

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A. Salvador 12 de marzo de 2013 at 14:28

Como no vivo en Andalucia no puedo juzgar con un conocimiento de cusa al cien por cien. Eso si, me parece pronto para hacer un balance de la alianza PSOE – IU, sera mejor ver como termina la legislatura. Mi punto de vista es que el PSOE, al menos de cargos intermedios para arriba, constituye una elite que perfectamente podia prescindir de la S y la O. Sus alturas estan llenas de gentes que forman (o quieren formar) parte del entramado burgues, aportando una version mas inteligente de dominacion de las clases subalternas. A ver que han hecho cuando han gobernado: dejarle bien encauzado el trabajo al PP. Luego, cuando les toca hacer de “oposición”, adquieren un color rosado. Solo hay que verles como viven, con quienes se codean y en que puestos se ganan la vida. Esa es su “inercia”. Que IU se asocie con ellos implicandose en gobernar parcheos paliativos sin ir mas alla, nos avisa tambien de por donde van parte de los cuadros de la organizacion. Si realmente es una fuerza anticapitalista, va salir trasquilada porque terminara siendo responsable ante mucha gente de su “resistencia” convertida en colaboracion con los retoques del sistema y ademas algunos de sus miembros le cogeran gusto a la comodidad de sillon, las nuevas amistades peligrosas y prevendas derivadas. Pensar que IU le va a hacer socialista al PSOE es excesivamente osado. El pasado mas bien nos enseña lo contrario: es el PSOE el que psoecializa a IU. O a parte de su militancia. Al tiempo.
Tuvieron otra opcion: impedir al PP gobernar y apoyar (y promover) desde la oposición medidas favorables a las clases trabajadoras y populares. Combinandolo con estar a pie de calle, movilizandose extraparlamentariamente para no ser abducidos por el juego institucional. A mi juicio, habria sido una manera mas responsable de actuar que no se desentiende de un futuro mejor, pues de eso se trata, de propiciar un futuro diferente, no una integración en un presente continuista con cierto barniz de izquierda.

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antonio 12 de marzo de 2013 at 15:27

Yo desde mi humilde punto de vista, creo que en el gobierno de la Junta de Andalucia, se nota la mano de Izquierda Unida. Ya sé que hay mucha gente crítica. Ya sé que podrán haber y cometer muchos errores. Pero lo que no cabe duda es la implicación de IU por llevar politicas de izquierdas al gobierno andaluz, y eso con solo un 12% de su peso en votos.
Pero solo voy a poner un muestra de ejemplo.
Ya sé que la politica vá más allá que el reconocimiento de personas. Pero el hecho de que en 30 años de gobiernos en la Junta de Andalucia, hasta el año presente no se haya reconocido al «malogrado» Manuel José Garcia Caparrós, denota el barniz que ha impregnado Izquierda Unida.
Podía hablar de las oficinas antidesahucios que se ha creado desde la Consejería de Fomento y Vivienda en manos de IU, o del proyecto del banco de tierras, etc pero me quedo con lo anteriormente expuesto.

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Andres Niporesas 12 de marzo de 2013 at 16:21

Hace unos años, Krugman comentaba que España al no poseer moneda propia, no tenía mas remedio, de seguir en el Euro, que realizar una devaluación interna que cifraba en torno al 20%. Hace poco un economista alemán, asesor de Merkel, nos lo ponía mas feo y calculaba es devaluación en un 30%. No se si se refería, desde el comienzo de la crisis o desde ahora.
El problema de las medias es eso, que son medias. Mucho me temo que si no nos espabilamos, unos cuantos, la mayoría, pagaremos una devaluacion del 70% mientras que los de siempre se irán de rositas incluso aumentaran sus rentas. Por supuesto la devaluación media será en torno al 25%.
También hace poco una empresa de telecomunicaciones indemnizó a tres directivos que sobrepasaban los 65 años, no se sabe muy bien por qué, con unos emolumentos que superan los 40 Millones de euros. Si seguimos asi, a Vd y a mi nos va a tocar soportar una devaluación del 90%. Ante la imposibilidad de una devaluación de moneda !Vigila al vecino! Lo que él se lleve de más lo vas a pagar tu.
!Por la devolución de las rentas usurpadas!

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Adolfo Ferrera Martínez 12 de marzo de 2013 at 21:57

En Asturias tenemos años de experiencia de gobiernos PSOE-IU. El resultado es que Asturias está, junto a Andalucía, en la ruina más absoluta, viviendo de las prejubilaciones y las pensiones de la industria y la minería que hubo hace años y que desmanteló el PSOE por orden del capital instalado en Bruselas. Sé de lo que hablo porque soy y vivo en la cuenca minera (La Felgurera, municipio de Langreo, en el valle del Nalón). Por no hablar de que IU y PSOE están ahora desfilando por los juzgados por su gestión pasada. Yo parto de la base de que el PSOE es un partido capitalista, y por tanto un partido de izquierdas no puede pactar con él nada. No hay que pactar con el PSOE para «gestionar» el capitalismo, sino acabar con el sistema capitalista y construir el Socialismo. Los pactos con el PSOE sólo sirven para que IU no pueda nunca presentarse como una verdadera alternativa, porque será visto por los ciudadanos como un partido más del sistema, «parecido al PSOE», como dicen muchos ciudadanos. IU no debe ser la alternativa a la derecha del PP, sino la alternativa al capitalismo, y en ese capitalismo está incluido el PSOE. ¿O es que el PSOE propone nacionalizar el IBEX 35, recuperar soberanía monetaria, o expropiar, por ejemplo, a la Duquesa de Alba a la que ponen medallas? Repito: el problema no es para al PP, sino al capital, y el PSOE es sumiso, es cómplice de ese capital. IU se pega un tiro en el pie cada vez que pacta con la socialdemocracia capitalista y neoliberal. Un saludo.

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Miguel Ángel 13 de marzo de 2013 at 00:20

Estima Juan López:
La pregunta del artículo es interesante ¿Valdrá la pena seguir, desde IU, en un pacto con el PSOE en Andalucia?.
Sinceramente, no tengo la respuesta a tal pregunta, pero la lectura del texto escrito desde Construyendo la Izquierda (http://www.construyendolaizquierda.com/)por Daniel Puerto García, Francisco Jesuss Barba Viruel,Javier Hernández Padilla,Isabel Rodríguez Domenech,Pedro González de Molina,Victoriano Fernández Fernández, Carlos Martínez García, Manuel Garcia Algarra,Antonio Moreno; nos aporte algunas aclaraciones.
Veer el texto en el link:
http://www.construyendolaizquierda.com/2013/03/a-donde-vas-psoe.html
un abrazo y gracias.

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Joaquin Terron 13 de marzo de 2013 at 10:56

Yo fui de lo que votó a favor el pacto y no me avergüenzo de ello y creo que nadie debe de avergonzase, y ahora toca tomar la decisión de salirse ya, si perjuicio de que coincido con Juan Torres en el motivo de mi voto: «la izquierda pierde toda su credibilidad ante la sociedad si, cuando puede, renuncia a transformar el día a día del marco real en el que los seres humanos desarrollamos cotidianamente nuestra vida.»
Hasta ahí las coincidencias, a estas alturas cuando el PSOE se niega a investigar la legalidad de la deuda, no creo que esté por llevar a cabo una política de iz en Andalucía.
El compañero Valderas nunca tuvo «intenciones» de promover políticas de izquierdas, y eso se ve en el paupérrimo 4% del presupuesto que gestionamos.

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Alejandra 13 de marzo de 2013 at 11:15

Esta coalición de gobierno PSOE /IU tendría que haber hecho algo más que gestionar con menos recursos. Tendría que haberse plantado y rebelarse. El Presidente Grignan tendría que haber salido en la Radio Televisión de Andalucía y decirle a la población que había que rebelarse, que no podía ser, que había que tomar medidas contra la política del PP y del Gobierno Central. Seguramente IU hubiera apoyado esta postura, al menos sus bases sí. Y hacer una marcha a Madrid (sí, al estilo Gordillo, ¿por qué no?). Acciones contra unas políticas del Gobierno Central que nos están llevando a la España que no debería ser, esa que parecía que habiamos superado para siempre. Y al mismo tiempo cambiar de políticas, eliminar corruptelas y nepotismos, incentivar otra economía en la que el «ladrillo» y la financiación de los Ayuntamientos con licencias de obras no pudieran darse, en las que la potenciación del turismo no derivara ya nunca más en hormigonar playas y hacer campos de golf. Y desacreditar para siempre la corrupción, aunque sea «de casa», denunciarla con rapidez y juzgar a los culpables.¡Otras políticas son posibles¡¡

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Joaquin Terron 13 de marzo de 2013 at 11:20

Efectivamente el pueblo de Andalucía ha debido de ser iluso cuando se ha creído una y otra vez las promesas del compañero Valderas. Promesas que pretendia un pueblo sumiso. Me parece poco ético prometer a todas esas personas que están en la más absoluta desesperación, que se les arreglarían todos los problemas. Para ello no tiene mesura en anunciar como principal hacedor en Canal Sur estos recortes:
» En Andalucía, (extraído del el manifiesto de la Plataforma Marea Ciudadana en Granada, apoyada y firmada por IU-Granada, con la que se convocaba a la manifestación del 23F) el gobierno del PSOE-IU TAMBIÉN recorta. Los presupuestos presentados para el 2013 en la Junta, están confeccionados siguiendo las MISMAS tesis de cumplimiento de objetivos de estabilidad presupuestaria impuestos por el gobierno central del PP y suponen un RETROCESO incluso respecto a los últimos aprobados por el PSOE en solitario. El presupuesto tiene una disminución de un 4’1% respecto al anterior (de 32.020 millones de euros pasa 30.706). Este recorte ha ido a las partidas sociales. Se disminuye por ejemplo:
– 1.000 millones de euros en SANIDAD (10’6% de recorte); 
– 600 millones de euros en EDUCACIÓN (8’6% de recorte);
– 360 millones de euros en EMPLEO (30’3% de recorte);
– En Servicios Sociales un 17,9%;
– La coordinación de las políticas migratorias, un 54´1%,
– Y la protección de las mujeres que sufren la violencia de género, nada menos que un 54´4%, de 8’6 millones de euros a 3´9. »
Recomendamos participar en el grupo de facebook: https://www.facebook.com/groups/352269054891533/

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Alejandra 13 de marzo de 2013 at 11:25

Y dicho lo anterior tengo que decir que me identifico con lo que dice Adolfo Ferrera Martínez, de Asturias. ¡Saludos compañero¡
El PSOE no es un partido socialista, eso hubiéramos querido¡¡. Es el partido del pasteleo, del «si pero no» y del pacto sonriente con el gran capital. En Andalucía IU tendría que haberse quedado en la oposición como garante de una política de izquierdas (esperemos que para IU ser «de izquierdas» signifique todavía construir otro modelo de sociedad y otro sistema económico en beneficio de la gran mayoría).

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Pía Uribe 13 de marzo de 2013 at 11:27

Estoy totalmente de acuerdo con lo manifestado por A. Salvador.
Me ha parecido interesantísimo el Link proporcionado por Miguel Angel. He entrado en el periódico al que remite que pienso leer más despacio, en el que entre otras cosas se dice, «la decadencia del socialismo comenzó con Felipe González» yo añadiría, incluso antes de gobernar.
Me encantaría y le agradecería muchísimo que nos proporcionase su opinión sobre dicha publicación. http://www.construyendolaizquierda.com

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Lola Morcillo 13 de marzo de 2013 at 13:31

Trabajo en un hospital público andaluz hace 35 años y le puedo asegurar que el lenguaje económico se ha introducido totalmente, donde antes importaba la calidad humana ahora es productividad,esa palabra que tan poco se adapta a esos momentos difíciles,en que necesitamos calidad, escucha, comprensión.Tenía la esperanza de que IU introdujera un poco de aire fresco, pero me temo que seguiremos con la productividad mientras se reducen contratos a nuestra juventud.

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Marga 13 de marzo de 2013 at 16:19

La izquierda en España desapareció. Solo queda el nombre. La globalización, el euro, la oligarquia mundial existente, no deja paso a partidos a la antigua usanza. La sociedad tiende a la existencia de los explotadores: banca, multinacionales y pueblo sin Derecho alguno, con miedo mucho miedo. En Europa el imperialismo de Alemania frente a Grecia, Portugal, y España muy escandaloso y preocupante. Donde estan los politicos? Vendiendo a sus pueblos, todos. Rajoy el gran farsante es seguido por todos los que callados hacen el teatrillo con el. Que salgan los politicos que quieren a su pueblo y que se pongan al lado de los que les quitaron su casa, su trabajo y todo lo que la Constitucion nos concedia por Derecho y es mentira.

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José Luis 13 de marzo de 2013 at 16:52

Mi opinión es muy simple, pero no por ello creo que sea menos interesante. El pacto con el P$O€ es una verdadera barbaridad. Juan López, cuando hablas de la izquierda deberías desechar al P$O€, ya que la memoria histórica reciente nos demuestra bien a las claras que no es de izquierdas. Un partido que lidera desde su Secretaría General la OTAN, que reforma el artículo 135 de la constitución para hacer recaer la ESTAFA sobre los hombros de los trabajadores y demás sectores populares, que no grava las grandes fortunas, muy al contrario las privilegia, que no modifica la Ley Electoral a sabiendas de que es antidemocrática, que permite que los grandes capitales vayan a paraisos fiscales, que ha gobernado en España aliado con la derecha nacionalista catalana, antes que unirse con IU, etc., etc., etc. no es de recibo que tenga el apoyo de una formación anticapitalista, republicana y federal, como es IU. No es de recibo ese cuento de que en Andalucía los andaluces han votado a la izquierda para que gobierne. Eso es un cuento chino. Los andaluces votaron mayoritariamente a la derecha genuina (PP) y a la socialdemocracia (la otra derecha) y tan solo una minoría, eso sí, en mayor número de votos que en las anteriores elecciones, votamos a la única izquierda que hay en este país y que es IU. En consecuencia, si IU se deja de hacer de bastón y sostén de la socialdemocracia iremos ganando el respeto y el apoyo de los trabajadores y demás sectores puteados por el CAPITAL que defienden al unísono (con pequeñas diferencias) el PP y el P$O€.
NO AL PACTO CON LOS «SOCIOLISTOS».

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Ivan 13 de marzo de 2013 at 21:47

Yo a la pregunta de Juan respondería que nada es verdad ni mentira sino que todo depende del color del cristal con que se mira. Desde el punto de vista de quienes protagonizaron la reforma política del franquismo y contemplan la política como alternancia de poder de partidos compromisarios de la burguesía y sus intereses de clase, el pacto de gobierno de IU con uno de los grandes partidos alternantes desde el estricto cumplimiento de la legalidad vigente debe ser visto como un mal menor para salvar el modelo. Por el contrario, quienes contemplamos con estupor la deriva neoliberal que sufre España como consecuencia de las políticas de relevos (en que no existe la marcha atrás) entre PP y PSOE preferimos ver el pacto entre este partido e IU como una traición de la coalición a sí misma como opción emancipadora y transformadora, aunque hay que reconocer que contó con el respaldo mayorítario de la militancia. La clave reside en definir el papel que IU juega en la política española.
El PSOE ha dejado claro por activa y por pasiva que ya no está entre sus objetivos conseguir un capitalismo de rostro humano sino hacerle la vida cada día más satisfactoria a la clase dominante. Las recientes declaraciones de Rubalcaba pidiendo una transición política en Venezuela hacia el modelo turnista, corrupto, servil y vendepatrias de su socio Carlos Andrés Pérez pone de manifiesto lo que el felipismo representa en España y en el mundo, un modelo totalmente incompatible con el socialismo del siglo XXI que representa el PSUV de Hugo Chávez y en el que debe verse reflejada IU. Juan Rivera, miembro del Colectivo Prometeo y del Frente Cívico-Somos Mayoría, denunciaba hoy en su interesante artículo «Qué difícil es hacer la revolución desde los despachos» la falta de coherencia y compromiso en parte de los líderes de IU en Andalucía. Mientras las bases que votan a IU y líderes como Sánchez Gordillo y Alberto Garzón reclaman cambios profundos, en la línea del socialismo bolivariano, para algunos altos cargos de la coalición la política no parece que sea algo más que una retórica y una forma fácil de adquirir estatus y renta.
Si hemos de creer a Josep Fontana, hoy se está produciendo en España una deriva hacia la extrema derecha del PP, con manifestaciones como la reforma laboral (que están debilitando a la clase trabajadora y a los sindicatos), el estrangulamiento económico de las comunidades autónomas y el vaciamiento de funciones a meramente administrativas en las administraciones locales, sin que pueda afirmarse que este representando una ruptura con las políticas que venía practicando el PSOE. Ante una situación tan dramática, no vale la política de paños calientes que intenta aplicar IU con su pacto de gobierno en Andalucía.
Yo creo que hay todavía demasiada gente en la dirección de IU que si saben ni quieren ser alternativa de poder. Por poner un ejemplo, la Constitución y la Ley General de Sanidad reconocen el derecho a la salud de todos los españoles, un derecho que solo se puede garantizar desde la prevención de las enfermedades y la promoción de la salud, existiendo un alto nivel de conocimientos en estas áreas. Sin embargo, el modelo sanitario español no ha ido más allá de la universalización de la medicina reparadora, con un altísimo coste en calidad y años de vida además de económico y que ahora, con ser claramente insuficiente, está en peligro como consecuencia del proceso privatizador. ¿Deberíamos conformarnos con el modelo del PSOE centrado en la medicina reparadora, despilfarrador (sobre todo en gasto farmacéutico), corrupto o deberíamos reivindicar en IU un modelo acorde con el nivel de conocimientos en salud pública, medicina social, medicina comunitaria y todo lo relacionado con la promoción de la salud, eficiente y esencialmente público? Mi experiencia en IU es que este enfoque de la sanidad brilla por su ausencia y que por ello los únicos sanitarios que suelen participar son los que defienden intereses corporativistas. La nula visibilidad en IU de los expertos en salud pública y medicina social y la casi nula visibilidad en el proceso privatizador que sufre la sanidad pública son síntomas de una gravedad extrema cuando se trata de un partido que dice pertenecer a la izquierda transformadora. Para mí, todo lo que no sea avanzar en la prestación de servicios sanitarios y no sanitarios que mejoren la salud de los españoles y hagan más eficiente el sistema sanitario no merece otro calificativo que el de crimen organizado, cuyo coste en vidas humanas, en calidad de vida y en gasto sanitario es intolerable.

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pepso 14 de marzo de 2013 at 11:17

Esto es como lo de Iberia. Iban a echar a 3800 y como solo lo hacen con 3100, ya ves, es solo negro, aqui el blanco no existe, hay quien lo ve como una victoria. Pensar que Guatemala es mejor que guatepeor nos llevara al desastre y pienso que tenemos que seguir reprochandote el apoyo que diste a esta situacion, la de que IU entrase en el gobierno.

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Miguel Ángel 14 de marzo de 2013 at 18:42

Estimado Juan Torres lópez:
El comentario de la compañera Pía Uribe es indicativo. En la última linea dice «Me encantaría y le agradecería muchísimo que nos proporcionase su opinión sobre dicha publicación.»Pía Uribe se refiere al artículo titulado ¿A dónde vas PSOE?, redactado y firmado por los compañeros desdes el Socialismo de Izquierda ( Tribuna Socialista,Iniciativa Socialista de Izquierda,Socialismo veintiuno,entre otras asociaciones).
Link:http://www.construyendolaizquierda.com/2013/03/a-donde-vas-psoe.html
En mi opinión creo que dicho articulo pone en cuestion el planteamiento y las ideas que expresas en tu artículo.Por ello remarco la idea de Pía: seria necesario que proporcionanse en otro articulo las semejanzas y las diferencias con el articulo del link citado.
Un abrazo cordial.
Gracias.

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Enrique 15 de marzo de 2013 at 13:09

Buenos días: Completamente de acuerdo en el comentario. Desde la izquierda no podemos eludir las responsabilidades que nuestros votantes nos han otorgado gracias a su voto y confianza. Dicho esto, no debe suponer un giro copernicano respecto a nuestros ideales y objetivos a medio y largo plazo. No se pueden consentir «relajaciones» injustificadas frente a corruptelas, problemas con el medio ambiente y , de nuevo, corrupción, como el caso del hotel del Algarrobicolo, simplemente porque ahora «gobernamos en coalición». Gobernar es responsabilidad con todos los ciudadanos, y si eso supone denunciar aspectos ilegales o fraudulentos cometidos por tu socio, pues hay que hacerlo. Si no, estaremos condenados a que la ciudadanía termine pensando que «somos igual que todos».

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