Cuando anoche el reloj se acercaba a las cuatro de la mañana decidí que ya estaba bien porque hoy tenía clase temprano (demasiado temprano) aunque aún tenía ganas de seguir leyendo de un tirón las Memorias de Teodulfo Lagunero que ha editado UMBRIEL.
¿Qué decir de su vida? La de un hijo, hermano, sobrino de represaliados y él mismo perseguido y encarcelado por el franquismo, catedrático, abogado, empresario, republicano, comunista, mecenas de mil proyectos, buen hombre y, si lo tuviera que definir en una sola palabra, luchador.
Leer sus Memorias es conocer un trozo fundamental de nuestra historia, de sus porqués y de sus luces y sombras. Y, principalmente, introducirse en la trastienda para ver de cerca cómo fue y cómo se hizo la transición política en nuestro país. Léanlo y prepárense para disfrutar.
Y desde aquí, un abrazo al luchador, al amigo y lector de la web, al que ojalá tenga la posibilidad de volver a ver pronto.