El cardenal español Rouco Varela, conocido por su ideología y posiciones políticas de extrema derecha y por su beligerancia activa contra los gobiernos progresistas, ha dicho, refieriéndose al proceso de paz en el País Vasco, que “uno no puede comulgar” cuando no hay “un arrepentimiento, un propósito de la enmienda, una reparación y una petición del perdón».
Esto último siempre me pareció, más allá de un simple mandamiento de los católicos, un principio de justicia que debería presidir el comportamiento humano. Pero creo que también debería aplicárselo la Iglesia Católica a sí misma por todos los crímenes e injusticias que ha cometido a lo largo de la historia. Cuesta decirlo, pero es que es así.
Hay más fotos de este tipo aquí: http://www.nobeliefs.com/nazis.htm