El rey Felipe de Borbón no parece disimular su disgusto o simpatías y quizá debiera hacerlo si quiere seguir siendo monarca de todos los españoles, sin distinción. Se le nota demasiado.
Numerosas leyes están excluyendo del voto a millones de personas en Estados Unidos como parte de una estrategia de la extrema derecha y de las grandes empresas orientada a acabar con la democracia en aquel país. Al mismo tiempo, eso sí, que dicen garantizarla en el resto del mundo.
2024 puede ser el año del gran ascenso electoral de la extrema derecha y las corrientes democráticas, de izquierdas o derechas, no parece que estén en condiciones de reaccionar o dispuestas para evitarlo.
Quienes marcan las tendencias del pensamiento suelen hablar del futuro con la seguridad de quien lo conociera a la perfección. Una estrategia que provoca sumisión y condiciona a su favor los cambios sociales
La extrema derecha ganas las elecciones en Países Bajos después de trece años de políticas liberales que han deteriorado las condiciones de vida de los grupos más vulnerables. Tenía que pasar cuando las izquierdas están en otra cosa.
El acuerdo entre el PSOE y Junts per Catalunya contiene un relato que se relata a sí mismo, sin hechos. Veremos en qué queda pero me parece difícil que la política resuelva de verdad los problemas cuando sólo se basa en palabras, palabras y sólo palabras
Ni el candidato a la presidencia argentina Javier Milei, ni los demás líderes anarquistas de derechas que brotan como setas en todo el mundo son lo que dicen. Ni defienden la libertad, ni la propiedad, ni renuncian a utilizar el Estado.
Siempre que se ha propuesto reducir la jornada laboral ha habido críticas muy duras del poder establecido. Sin embargo, sus resultados, a la larga, no sólo tan desastrosos como se dice: han tenido un saldo claramente positivo.
No es una mano invisible la que organiza la economía mundial, como se quiere hacer creer, sino un puño de acero que defiende los intereses de quienes acumulan riqueza y poder desmedido
Es fácil de expresar: el terror y los crímenes de guerra son condenables los cometa quien los cometa. Pero muy difícil que se asuma y se respete como principio moral. Una tragedia.
Nuestro planeta es como una nave espacial con recursos limitados que se conduce inmoral y alocadamente... y no parece que estemos dispuestos a reaccionar
El título de este comentario es el del libro que acaba de publicar en Editorial Espasa José Esquinas Alcázar. Un título que lleva una segunda parte esclarecedora: Cómo frenar la amenaza a nuestra supervivencia. El autor es ingeniero, doctor por la universidad de California y ha sido profesor universitario e investigador durante varios años, pero creo que su trayectoria destaca, sobre todo, por su labor en el seno de la FAO, la organización de las Naciones Unidas para abordar los ppp Leer artículo
Casi el 15% del producto mundial dedicaron las empresa, hogares y gobiernos en 2022 a pagar intereses: 13 billones de dólares que se metieron los bancos en sus carteras prestando el dinero que crean de la nada.
Como bien sabe quien me lea, no sólo mantengo bastantes discrepancias con Podemos por sus posiciones políticas. También, porque creo que quien dirige una formación política debe cuidar y querer a la gente y yo no me sentí así cuando elaboré el famoso documento de debate para su programa económico. Sin embargo, me siento en la obligación moral de manifestar mi solidaridad con sus dirigentes tras la cacería judicial y mediática a la que han sido sometidos y, muy en ppp Leer artículo
Hacen creer que el desempleo es inevitable, o que es una consecuencia de evitar un problema mayor como la inflación. Y es falso, lo crean deliberadamente.
La práctica del favor para conceder privilegios que beneficia a muy pocos y perjudica a la inmensa mayoría es muy difícil de erradicar cuando las autoridades no dan ejemplo y la utilizan en su beneficio.
Pudiera parecer que Trump, Milei y otras figuras de la nueva extrema derecha son locos que van por libre haciendo propuestas radicales. Pero no lo son, ni están solos.
Si la amnistía de los delitos cometidos por Puigdemont y otras personas fuera realmente la solución democrática y auténtica de los problemas que se han vivido en Cataluña ¿por qué ni el PSOE ni Sumar llevaban esta "solución" en sus programas electorales?